Correr a través de un sembradío de maíz, deslizarse por una colina enlodada y chapotear por una corriente de aguas residuales. Caminar con los ojos vendados por un camino lleno de baches guiados por un coyote y acosados por la policía migratoria de Estados Unidos y los grupos de “cazadores de personas” como Minutemen y otros grupos racistas. En el recorrido se siente temor, cansancio y momentos de placidez, interrumpidos por el temor a ser detenido… 
No. No se trata de la descripción del viaje por el desierto que deben hacer miles de latinoamericanos para cruzar la frontera entre México y Estados Unidos… se trata, más bien, del “Simulador de Inmigración Ilegal en Eco Alberto, en el estado mexicano de Hidalgo.
El simulador de inmigración ilegal es, según el Dallas Morning News, una de las experiencias turísticas más bizarras de México. Pagando 15 dólares, uno puede, junto con otras docenas de personas vivir en carne propia una de las experiencias más electrizantes y peligrosas que enfrentan los miles de trabajadores que intentan hacer realidad el “sueño americano”: cruzar la frontera de Estados Unidos de forma ilegal. En un viaje que frecuentemente se vuelve mortal.
La experiencia turística es semanal y se ofrece en un parquet ecológico en Eco Alberto, a unos 100 kilómetros de la Ciudad de México, en el estado de Hidalgo. ESCUCHA EL PODCAST PASAJEROS CON DESTINO para más crónicas y consejos de viaje para viajeros con poco dinero...
1 comentario:
Sólo esto nos faltaba, simuladores para vivir la experiencia de un ilegal al cruzar la frontera! pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos
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