"No te detengas a almorzar: ponte adelante de tu competencia"
- Un personaje mostrando cómo funciona el alimentador automático para obreros en Tiempos Modernos (1936) de Charles Chaplin
La máquina como sustituta del hombre y la lucha de un vagabundo y una mujer sin casa para vivir en la era industrial, era el argumento de Tiempos Modernos, film dirigido por Charles Chaplin y que se considera uno de los grandes clásicos del séptimo arte.
En la cinta reímos al ver las dificultades que tiene Chaplin para sobrevivir a una jornada de trabajo lidiando con complicadas máquinas y procesos, que se extienden, incluso a una innovadora máquina que alimenta al obrero para que no pierda mucho tiempo comiendo sus alimentos. Y la situación evidenciaba una realidad que se puede ver actualmente: el obrero que trabaja en ese submundo de una fábrica, en medio de máquinas, calor y un ruido insoportable, vive en una pobreza insultante, que no corresponde con el enorme esfuerzo que debe hacer en su trabajo.
La película, filmada en 1936, dejaba ver las contradicciones profundas de la sociedad industrial. No obstante, en aquellos años, la interdependencia obrero-máquina era aún fuerte. Hoy en día, las máquinas requieren cada vez menos interdependencia en muchos de los procesos productivos.
Todo esto viene a cuento porque, la semana pasada, visité, con cierto diplomático extranjero, una de las fábricas que hay en mi ciudad. De hecho fueron dos fábricas y lo que vi ahí fue sorprendente y merecería un comentario más largo, quizás de un experto. No obstante, quiero decir dos cosas que descubrí en una de las fábricas: la ausencia de trabajadores. En una enorme planta llena de máquinas, donde hacían un ruido y un calor muy fuertes, apenas laboraban 3 trabajadores. Los trabajadores parecían unos fantasmas en aquel mundo desolado dominado por complicados mecanismos. La otra cosa que me sorprendió fue que dichas empresas, "globales" eran dirigidas por extranjeros que a pregunta expresa del visitante que yo acompañaba, contestaron que se habían instalado en mi ciudad porque los trabajadores eran más activos y productivos que los obreros europeos (que desde luego ganaban más).
En todo caso, aquel mundo de Chaplin, donde el trabajador es más bien una máquina más, y acaso un estorbo para un magnate que está sentado contando dinero, era un mundo que era cierto en aquel tiempo... En realidad, es un mundo que 70 años después sigue siendo cierto y que sin duda cumple con el sueño de los grandes magnates y las enormes compañías "globales" en los "Tiempos Modernos" de 2007. El sueño del magnate sentado en la cima del mundo contando dinero y destruyendo lo que haya que destruir se ha vuelto realidad: el trabajador cada vez tiene que hacer más cosas, en menor tiempo y lo más dramático: cada día que pasa es menos indispensable...
Otra frase memorable de la película:
Presidente de la Compañía Electro Steel:[desde la pantalla de vigilancia en el salón de descanso de la fábrica] ¡Hey tú! ¡Regresa al trabajo!
Frase tomada de imdb
Aquí un vídeo con escenas de la película editado por Zerothefool en Youtube:
En la cinta, como interés romántico de Chaplin, aparece Paulette Goddard, cuyo rostro es, acaso, uno de ls paísajes más hermosos que ha filmado una cámara de cine...
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